Petrolero se crucifica, pide jubilación de líderes sindicales en Nanchital

 

– Francisco Artigas Salomón, trabajador transitorio de la STPRM está por cumplir dos semanas en huelga de hambre, pidiendo también que se liberan las plazas y puedan ser empleados en las factorías.

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Nanchital, Ver. – A casi dos semanas de estar en huelga de hambre, Francisco Artigas Salomón, trabajador transitorio de la sección 11 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), decidió crucificarse frente a la sede sindical ubicada en el municipio de Nanchital.

Sus demandas principales son el desbloqueo de plazas y la jubilación del líder del grupo mayoritario 24 de octubre, Ramón Hernández Toledo, quien, a pesar de ya no ostentar el cargo de dirigente sindical, continúa siendo el líder moral.

Artigas Salmón clavo una madera en un poste de telefonía y se amarro con unas cuerdas de los brazos, y mantiene sus pies sobre otro pedazo de madera, emulando a Jesucristo quien murió crucificado por la ley romana.

Viste el uniforme de Petróleos Mexicanos: pantalón café y camisa azul marino; aunque en esta ocasión no porta el zapato industrial, pues se crucifico descalzo.

El trabajador petrolero asegura que ya es necesario un cambio en la dirigencia del Sindicato. Durante casi treinta años fue manejada por Ramón Hernández, y a pesar de que heredó el cargo a Jorge Tadeo Pérez, señalan que sigue detrás de él, generando una red de corrupción que solo da trabajo a los que apoyan sus decisiones.

Ha perdido 10 kilos a causa de la huelga de hambre

Cabe mencionar que Artigas Salomón se ha manifestado semidesnudo, en un par de ocasiones en meses pasados, ante la falta de trabajo desde hace más de diez meses, sin que puedan atender y resolver su demanda.

A partir del fin de semana el trabajador, dejó de ingerir líquidos ante la nula respuesta obtenida por parte del organismo sindical.

A doce días de no comer, ha perdido cerca de 10 kilogramos y su estado físico comienza a deteriorarse, sin embargo, afirma no desistirá en su lucha.

«Aquí me voy a morir, él (Ramón Hernández Toledo) no va a renunciar y yo aquí me voy a morir, algo va a pasar tienen que pasar, esto ya es lo último que voy a hacer, aquí se va a quedar toda mi lucha», expresó el trabajador en un video que transmitió a través de sus redes sociales.

Hasta el momento no existe una demanda ante las instancias correspondientes, fundada y motivada en materia laboral y sindical, por lo que la lucha del trabajador podría no tener efectos.

 

 

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Fluvio Cesar Martínez.