‘El páramo’: Netflix estrena película de terror española en donde la soledad se vuelve una pesadilla
Escrito en 6 enero 2022
La ficción española está siendo muy rentable para Netflix. Está claro que sobresalen series como ‘La casa de papel’ o ‘Élite’, pero las películas hechas en España también dejan huella. Basta con recordar los grandes éxitos que tuvieron en su momento títulos como ‘El hoyo’ o ‘Bajocero’.
Además, también parece que cada vez son más abundantes, pues se cerró el año con la simpática ‘A 1000 km de la Navidad‘ y este 6 de enero es ya el turno de ‘El páramo’, primer largometraje de David Casademunt que pudo verse durante el pasado Festival de Sitges. un nuevo título hispano que apela al horror, pero esencialmente psicológico.
Un debut estimable, sobre todo en lo referente a su capacidad de crear una atmósfera asfixiante y enrarecida, al que le falta un último empujón cuando todo parecía ir bien encarrilado.
La historia se ambienta en el siglo XIX, cuando Lucía (Inma Cuesta), Salvador (Roberto Álamo) y su hijo Diego (un destacado Asier Flores) se han aislado de la civilización, a causa un país herido por las guerras, situando su hogar en un llano de Teruel, el páramo del título.
Una de las particularidades de ‘El páramo’ es que la historia transcurre en el siglo XIX, algo que la película aprovecha más para incidir en la mayor presencia de las supersticiones para construir un thriller psicológico alrededor de la posibilidad o no de que una extraña criatura exista realmente.
Es así que, huyendo de la violencia y la locura, esta familia se estable literalmente en medio de la nada. Y aunque es su padre la figura protectora, el chico es muy cercano a su madre.
La trama muestra jornadas que incluyen noches con el relato de cuentos de terror, varios de los que inquietan, pero no asustan a Diego, hasta que su padre narra la historia de “la bestia”, una criatura de leyenda que camina por el mundo en busca de las personas más frágiles.
Un “monstruo” que claramente perturba a Salvador, quien afirma que cuando más se le teme más se acerca, que se alimenta de los miedos de las personas y que aunque no se vea, está ahí.
Una leyenda que marca el inicio del término de la tranquilidad para esta familia, que se ve empeorado cuando una barca aparece en el río cercano. A bordo de la cual viaja un hombre mal herido, que después se quita la vida ante unos asustados Lucía y Diego.
¿Será la bestia que se ha hecho presente o solo el producto de la soledad y una imaginación herida?
Una disyuntiva que recorre gran parte de la narración de El páramo, una cinta que, a pesar de abusar un poco del ritmo pausado, se convierte en la buena carta de presentación de Casademunt al mundo, mezclando el folk horror -subgénero con entorno rural, aislamiento y mitos- con el terror psicológico.